3 de septiembre de 2009

¿Manifestar ideas?

El día de hoy publica El Universal, la noticia sobre los enfrentamientos ocurridos en Oaxaca entre maestros de la sección 22 del SNTE y la sección 59, de donde surgieron actos violentos y vandálicos en las escuelas de la región en cuestión. 
Es absolutamente vergonzoso, que maestros que laboran en las aulas, y constantemente se quejan de la falta de medios didácticos y pedagógicos para impartir sus clases, quienes se quejan de las malas instalaciones con las que cuentan, sean a la vez, autores de pedradas en ventanas de los salones de clases y grafitis. 
Es necesario poner sobre la mesa la forma en la que expresamos nuestras divergencias, perteneciendo a diferentes grupos sociales o políticos. No sólo es legítimo ser diferentes y pensar diferente, sino fundamental para desarrollarnos como personas y como sociedad. La pregunta es ¿qué medios utilizamos para divergir? Nos escandaliza -o al menos parece- que el llamado bullying vaya en aumento, porque los flacos molestan a los gordos, los altos a los bajos, los unos contra los otros; nos escandaliza que unas comunidades se enfrenten a otras, porque hablan lenguas distintas, porque visten diferente, o porque votan a partidos políticos diferentes; Nos escandaliza que los diputados se disfracen en San Lázaro para efectos ridiculizadores de personajes y bancadas políticas. Nos escandaliza finalmente, vivir en un país azotado por una fuerte crisis social, económica y política, cuya solución no se encuentra con más policías (o peor aún, militares) en la calle, ni con subastas de dinero, ni elecciones. Vivimos esperando un acuerdo de la clase política que supere las visiones de partido e intereses personales, para lograr un horizonte más halagüeño para cualquier mexicano, sobre todo, para aquellos en condiciones de mayor vulnerabilidad y marginación. ¿Cómo esperamos eso, si tenemos profesores que se lanzan piedras por pertenecer a grupos diferentes? ¿Quiénes están siendo testigos directos de la intolerancia, la cerrazón, la violencia y la falta de diálogo?¿Cómo esos maestros van a entrar al aula el día de mañana para dar su clase de Cívica y Ética?¿Cómo transmitir competencias que incluyan valores que fortalezcan la democracia?
Esto lo aguantamos y fomentamos todos. Dejemos de cerrar los ojos, dejemos de callar al diferente, sentémonos a la mesa con el otro, para conocer antes de juzgar, y para comenzar por abrir nuestra corta visión de la realidad, para aprender que el mundo es redondo, y que cada uno lo mira desde diferentes sitios. Si queremos un país para todos, que sea de todos el punto de vista, y no sólo de los fuertes y de los grandes.

 http://www.eluniversal.com.mx/notas/623854.html

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